viernes, 28 de marzo de 2014

En Venezuela la secta Iglesia de Scientology (Cienciología) también infiltra partidos políticos

Henrique Capriles Radonski

Caterina Valentino
¿La tropa de Capriles infiltrada por la “Cienciología”?

Publicado originalmente el 4/09/13 en http://www.contrainjerencia.com/?p=65270

JEAN-GUY ALLARD – Una referencia de una colaboradora de la maquinaria electoral de Henrique Capriles Radonski ha reanimado rumores de una infiltración del circulo de los asesores del candidato opositor a la presidencia de Venezuela por la muy controvertida Iglesia de Cienciología de Estados Unidos.


Caterina Valentino, conocida modelo y periodista de la televisión venezolana que animó un acto político de Capriles sorprendió cuando el 5 de abril de 2013 en su cuenta Twitter @CATERINAV hizo referencia a la secta de perfil ultraderechista, escribiendo: “León Levy uno de los máximos representante de la Cienciologia en Venezuela ” El hombre es un ser bueno” (1).

Llamada en ingles The Church of Scientology, la organización supuestamente religiosa fue creada en 1953 por el escritor de ciencia ficción L. Ron Hubbard. Conocida por el público norteamericano por el hecho de que “celebridades” tales como Tom Cruise y John Travolta se sumaron a sus filas, la secta tiene un expediente judicial enorme tanto en América del Norte, donde se ha beneficiado de misteriosas protecciones, como en Europa – Francia, Alemania, Reino Unido – donde se han promulgado hasta leyes para poner fin a sus perniciosas actividades.

Investigada entre otras cosas por estafa e intento de infiltrar ilegalmente a instituciones públicas, la “Iglesia” fue denunciada en múltiples oportunidades por lavado de cerebro de sus adherentes sin recursos quienes, en cambio de “cursos de mejoramiento personal”, son obligados a trabajar gratuitamente por periodos casi sin limites en sus instalaciones.

En California, la “Cienciología” llega a adquirir un estatuto que preocupa a muchos: “Se dice que si quieres tener una carrera en Hollywood, debes reunir con ese red, todo el mundo allá lo entiende.  Dicen algunos que Washington es como un especie de Hollywood de los feos”, confía un conocedor de la organización que pidió conservar el anonimato.

Lo más sorprendente del expediente Cienciología es la relación actual de la secta con miembros del gobierno y en particular del Congreso norteamericano cuando el culto fue parte de una gigantesco complot de infiltración de sus agencias.

La operación Blancanieves fue el nombre clave de la conspiración para infiltrar, entre otras agencias, el FBI y la CIA con el objetivo de desviar beneficios para el culto. Miembros lograron a infiltrarse en 136 agencias gubernamentales cuando una gigantesca razzia llevada a cabo por el FBI llevo al arresto y condena, en 1983, de dirigentes del culto. El jefe, Hubbard, fue declarado cómplice pero logró escapar y murió siendo prófugo.

Comentando una investigación de la revista norteamericana The New Yorker sobre la misteriosa secta, el columnista Alex Paleene de la conocida revista Salon,  reveló en febrero 2011 (1) la lista de las complicidades de la “Iglesia” en Washington.

Paleene indicó entonces como el más activo apoyo del grupo en el Congreso son  Ileana Ros-Lehtinen y un colega de California,  Brad Sherman. Tambien nombra a Dan Burton (el ex representante, autor de la ley asesina contra Cuba) y la candidata a la vicepresidencia Sarah Palin.

Ros-Lehtinen y Brad Sherman fueron honrados en una Gala de Celebridades el 7 de agosto de 2004, un evento donde la representante de Miami se hizo fotografiar con John Travolta.

Según Paleene, el redactor de Salon, la Iglesia de Cienciología se encuentra investigada por el FBI en casos de abuso, incluso físico, cometido por sul líder David Miscavige, y del trabajo forzado de reclutas menores de edad, una actividad asimilada al trafico humano.

(1)  Fuente: CATERINA VALENTINO ‏@CATERINAV

(2) Alex Pareene, The Church of Scientology’s friends in Washington 10 /02/2011, Salon.com

lunes, 24 de marzo de 2014

Jennifer Lopez ayudó a Leah Remini a salir de Scientology (Cienciología)

Leah Remini y su gran amiga Jennifer Lopez
Por Petete "Argie" Anon para Anonymous Argentina

Jennifer Lopez visitó a Ellen DeGeneres en su programa para promocionar American Idol y su décimo álbum de estudio. Pero lo que más sorprendió, fue que lejos de los rumores que conectaban a Jennifer Lopez con la secta destructiva "Iglesia de Scientology" (Cienciología), la hermosa actriz y cantante habló sobre cómo salvó a Leah Remini de Scientology. La cantante ayudó a la actriz de The King of Queens y ex participante de Dancing With the Stars a tomar la difícil decisión de abandonar Scientology.

La jueza de American Idol, en el pasado fue acusada de ser una Scientologist junto con su entonces marido, el músico y productor Marc Anthony. Aunque no habló de esa acusación se abrió con Ellen DeGeneres sobre su apoyo a Leah Remini. Durante el programa del Viernes pasado Lopez dijo:

    “Sí. Fue un momento duro para ella. Es todo lo que conoció su vida entera. Cuando te crían de una cierta manera y estás alrededor de gente por mucho tiempo, cualquiera cosa que sea, va a ser difícil. Somos buenas amigas.”
 
Anteriormente Leah Remini ha sido muy abierta acerca de la amiga que perdió debido a su partida de la Iglesia de Scientology, la actriz Kirstie Alley, quien es una creyente firme y miembro de la Iglesia de Scientology. A finales del año pasado Kirstie Alley la contraatacó llamando "intolerante" a Remini.

Durante una entrevista con Howard Stern, la estrella de Cheers se explayó sobre lo que piensa de Leah abandonando Scientology:

    “La cosa conmigo es, no me importa de qué religión seas. Si alguien está atacando tu religión, yo cubriré tu espalda, y te defenderé. Creo que es la cosa más repulsiva que una persona puede hacer, atacar la fe de otra persona. Porque una fe es lo que buscás para tener esperanza, y es lo que buscás para ayudar a otra gente. Yo sólo creo que realmente está mal.”

Entonces Alley explicó porqué decidió excomunicarla:

    “La bloqueé en Twitter porque es una intolerante. Si alguien estuviera ahí afuera [diciendo cosas negativas sobre tu religión], ¿serían tus amigos?”

Queda claro, como de costumbre, que la intolerancia está dentro de la secta "Iglesia de Scientology" (Cienciología), no afuera, y quien es la verdadera amiga de Leah Remini.

Esto me recuerda a algo que Tory "Magoo" Christman, ex miembro de la secta de nivel OT 7, suele contar. El activista anti Scientology creador del sitio web informativo Operation Clambake Andreas Heldal-Lund, en una de las tantas comunicaciones por internet que mantuvo con ella cuando Tory aún estaba en la secta y él trataba de despertarla, una vez le dijo: "Si tus amigos van a cortar su relación con vos por abandonar tu religión, es porque nunca fueron tus amigos".

Lamentablemente esto ocurre todo el tiempo alrededor del mundo cuando la gente abandona Scientology (Cienciología), el grupo y sus miembros, amigos y familiares de quienes se van, pasan a verlos automáticamente como enemigos. Pero afortunadamente, la recuperación de la verdadera libertad, en el mundo real, trae consigo amistades genuinas, a diferencia de las que se tienen estando dentro de una secta.

[Crédito de la imagen: s_bukley / Shutterstock.com]

jueves, 20 de marzo de 2014

La AFIP cerró Narconon en Argentina

Por Petete “Argie” Anon para Anonymous Argentina

El 17 de Marzo pasado dimos la primicia en un post de nuestra página de Facebook de que la AFIP cerró Narconon en Argentina, el caro y peligroso centro de supuesta rehabilitación de adictos a las drogas y el alcohol (sin bases científicas genuinas ni personal médico en sus centros), que no es más que una fachada de la secta Iglesia de Scientology (Cienciología) para hacer dinero y reclutar miembros en sectores vulnerables de la sociedad.

Días atrás, casi por accidente, ex-miembros de Scientology Argentina nos comentaron en una charla que Narconon Argentina había sido cerrado por problemas con la AFIP. Consultamos con algunos miembros activos de la secta que nos brindan información y ellos lo confirmaron, si bien no poseían detalles. Era demasiado bueno para ser verdad, así que inmediatamente empezamos a chequear la información.

¿Qué encontramos?

1 En el centro Narconon, ubicado en Del Barco Centenera 984, San Isidro, Provincia de Buenos Aires, nadie atiende el teléfono (4743-8003), ni siquiera el fax funciona.

2 El sitio web del centro http://www.narconon.org.ar/ está desactivado, sólo mostrando una página en blanco, a excepción de la línea de texto que muestra la fecha y hora de cuando se ingresa.

3 En la sede de la secta Iglesia de Scientology (Cienciología) Argentina de Ayacucho 1050 en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires admitieron por vía telefónica que Narconon no está funcionando, si bien no brindaron mayor información y recomendaron hablar con Gustavo Libardi, Presidente de Scientology Argentina y su Oficina de Asuntos Especiales.

Nos comunicamos varias veces con distintas oficinas de la AFIP, pero aún estamos esperando información oficial por ese lado, así que pedimos ayuda a distintos contactos para que nos faciliten esa tarea.

Pero podemos confirmar por los tres puntos expuestos anteriormente que Narconon Argentina actualmente no está funcionando.

Cuando dimos la noticia en la página de Facebook de Anonymous Argentina, las repercusiones se hicieron sentir alrededor del mundo. Medios de comunicación, activistas por los derechos humanos y anti Scientology y grupos anti sectas de países de todos los continentes la difundieron. Por dar sólo un ejemplo aquí pueden encontrar una nota escrita por David Love para Wire Service Media de Canadá, que nos hizo un reportaje por el tema.

Pronto tendremos detalles de la situación impositiva de Narconon en Argentina y la agregaremos actualizando esta entrada del blog. Mientras tanto, festejamos que Narconon haya cerrado sus puertas y no dañe a más gente. Debería haber sido cerrado por el Ministerio de Salud por su práctica ilegal de la medicina que ejerce al igual que la secta Iglesia de Scientology (Cienciología) a la que pertenece, pero parece que como Al Capone, esta rama del sindicato del crimen va a terminar pagando por evadir el pago de impuestos en vez de hacerlo por las muertes que causó.

sábado, 8 de marzo de 2014

Libro "Cienciología. Hollywood y la prisión de la fe" de Lawrence Wright publicado en Castellano en Argentina por DEBATE

Por Petete “Argie” Anon para Anonymous Argentina

DEBATE acaba de editar en Castellano en Argentina uno de los más recientes y mejores libros de periodismo de investigación sobre la secta destructiva "Iglesia de Scientology": "Cienciología. Hollywood y la prisión de la fe" (Going Clear: Scientology, Hollywood and the Prison of Belief) de Lawrence Wright.

Esta primera edición de 3.000 ejemplares y más de 500 páginas contiene entrevistas con ex miembros reconocidos de la secta “Iglesia de Scientology” (Cienciología) como el director y guionista de cine ganador de un Oscar Paul Haggis, así como ex oficiales de alto rango como Marty Rathbun y Mike Rinder, entre muchísimos otros que dieron testimonio de sus años en esta organización.

La calidad de la investigación realizada por Lawrence Wright para este libro deja claro lo que puede lograr el periodismo de primer nivel cuando se interesa por los mecanismos de esta secta para captar miembros, infiltrar y ganar poder y dinero a nivel mundial, más allá del atractivo superfluo que ejerce sobre algunos la pertenencia de personalidades como Tom Cruise o John Travolta a esta organización.

Les recomendamos a todos nuestros seguidores comprar este libro, y esperamos que venda bien, ya que eso podría generar la posibilidad de que otros libros de investigación y denuncia sobre esta secta sean publicados, ya sean de periodistas reconocidos como de los muchos ex miembros que han escrito libros reveladores tras abandonar la secta.

A continuación reproducimos los textos de promoción del libro:


La investigación más profunda hasta la fecha sobre la cienciología.

¿Qué se esconde detrás de la Iglesia de la Cienciología?

¿Cómo ha logrado convertirse en una de las organizaciones más ricas y poderosas del planeta, y ser reconocida como religión por el gobierno de los Estados Unidos?

¿Por qué estrellas de Hollywood como Tom Cruise y John Travolta son fieles devotos de una de las organizaciones más criticadas del mundo?

Lawrence Wright, Premio Pulitzer por La torre elevada, y uno de los grandes periodistas de investigación del mundo, ofrece respuestas a estas y a otras muchas preguntas, y nos devela la historia y la complicada cosmología de una organización tan intrigante como poderosa que ha conseguido captar a ricos y famosos y ha sabido utilizarlos para alcanzar sus objetivos. A través de un trabajo de investigación sin precedentes sobre una de las instituciones más opacas y secretistas que existen, Wright reflexiona sobre qué convierte un culto cualquiera en una religión, y sobre por qué los seres humanos eligen unas creencias sobre otras. Una historia apasionante sobre el atractivo de la fe extrema y el coste de abandonarla. «Una historia completamente necesaria... un reportaje sobresaliente. La historia de la Cienciología es la gran ballena blanca de la investigación periodística sobre religión.» The Wall Street Journal «Un libro poderoso... una lectura esencial.» The New York Times Book Review

Lawrence Wright se licenció en la Universidad de Tulane, en Nueva Orleans, y trabajó durante dos años en la Universidad Norteamericana de El Cairo, Egipto. Es escritor, guionista, autor teatral, redactor de The New Yorker desde 1992 y miembro del Centro sobre Leyes y Legalidad de la Facultad de Derecho de la Universidad de Nueva York. Es autor de La torre elevada (Debate, 2008), el mejor libro sobre el 11S que obtuvo una infinidad de premios. Antes había publicado varias obras de no ficción: City Children, Country Summer; In the New World ; Saints and Sinners ;Remembering Satan; Gemelos y una novela, God's Favorite. Además es coguionista de la profética película Estado de sitio, protagonizada por Denzel Washington; en la que unos agentes de la CIA y del FBI intentan detener una cadena de atentados terroristas que amenazan la ciudad de Nueva York.

FUENTE:
http://www.megustaleer.com.ar/ficha/9789871786862/cienciologia

domingo, 2 de marzo de 2014

Claudia Gaido, nueva muerte en Scientology (Cienciología) Argentina

Claudia Gaido (derecha) premiada en Scientology, hoy muerta
Por Petete “Argie” Anon para Anonymous Argentina

Además de planeando y realizando nuevos eventos de recaudación de fondos para obtener aún más dinero de sus miembros, el año 2014 comenzó con una muerte en las filas de la secta destructiva conocida como “Iglesia de Scientology” (Cienciología) Argentina.

El día 16 de Enero de 2014 la Iglesia de Scientology Argentina envió un email interno y publicó en varias de sus páginas de Facebook la noticia de la muerte de Claudia Gaido, de 54 años de edad, para informar a sus miembros.

Scientology Argentina
16 de enero
La comunidad de Scientology Argentina, quiere despedir hoy a un Thetan muy importante que ayudó a mejorar el planeta un poco más, no tenemos palabras para agradecer todo lo que ayudo a nuestro propósito, Hoy dejaste tu cuerpo, pero nos vamos a volver a encontrar, HASTA SIEMPRE CLAUDIA GAIDO.

Poco después obtuvimos detalles de miembros activos así como ex miembros de la Iglesia de Scientology (Cienciología) Argentina que habían conocido a Claudia Gaudio, quienes si bien estaban shockeados por su muerte, no se sentían sorprendidos, ya que la suya, como tantas otras en Scientology, era una muerte que se veía venir.

Claudia Gaido, de la Provincia de Santa Fe, murió siendo una OT 8, el máximo nivel al que se puede llegar en la Iglesia de Scientology en la actualidad, en el cual uno supuestamente no puede enfermarse, puede manejar a voluntad materia, energía, espacio y tiempo, crear universos y poseer una serie de poderes que causarían la envidia del más dotado de los superhéroes de comics, si estos existieran, así como los poderes que promete Scientology.

El caso de la muerte de Claudia Gaido es una prueba más de su inexistencia, que ellos seguirán negando y excusando con variedad de argumentos, mientras pierden miembros, no sólo porque se mueren como moscas, sino porque se dan cuenta que han estado metidos en una gran estafa multinacional.

Así como el fundador de Scientology, el escritor de ciencia ficción L. Ron Hubbard (quien decía que "Fumar no causa cáncer de pulmón. No fumar lo suficiente causa cáncer de pulmón"), Claudia Gaido era una fumadora empedernida. Hacía años que tenía problemas respiratorios y unos ataques de tos casi constantes que impresionaban. En 2012 decidió ir a Flag, en Clearwater, Florida, la “Meca” de Scientology, esperando que luego de un tiempo allí y terapias de más de cien mil dólares, su problema de salud fuera solucionado. Cuando regresó, bajó del avión con más de 40 grados de fiebre, en pésimo estado y sumamente débil.

Un año y medio después, la Iglesia de Scientology dice que Claudia Gaido “dejó su cuerpo”, tal como dijeron en 1986 cuando el fundador de esta secta murió en la clandestinidad, escapando de la justicia, con drogas psiquiátricas que decía combatir (y su organización aún lo hace) en su organismo.

El sentido común nos dice que, fuera de Scientology, Claudia Gaido hubiera podido recibir tratamientos médicos que, en caso de no haberla curado, hubieran hecho más tolerable sus últimos años, y muy probablemente hubieran alargado su vida. Lamentablemente en Scientology, pese a lo que digan a los medios de comunicación para hacer relaciones públicas y dar “verdades aceptables”, se oponen a la medicina y piensan que los medicamentos sólo enmascaran el problema. Ni siquiera creen en las enfermedades, ya que piensan que todas son psicosomáticas, que si uno se enferma se lo está generando a sí mismo, es por algo malo que hizo en vidas pasadas, o porque tiene a alguien “supresivo” cerca, a quien debe identificar para entonces “desconectarse” de esa persona que le está haciendo mal, aunque ni siquiera se dé cuenta de ello.

La noticia de la muerte de Claudia Gaido nos entristeció mucho. Si bien Anonymous en el “Proyecto Chanology” lucha contra Scientology y busca desmantelarla mundialmente, no consideramos a sus miembros nuestros “enemigos” como ellos en cambio parecieran adorar considerarnos a nosotros los suyos. Sabemos que lo hacen por las políticas escritas por su fundador, L. Ron Hubbard, que deben seguir al pie de la letra si quieren considerarse buenos Scientologists. Sabemos que la mayor parte de sus miembros son buena gente, que realmente quiere ayudar a hacer de este mundo algo mejor, y piensan que Scientology es la forma de lograrlo. Las buenas intenciones son lo que más atrae y tienen en común la mayoría de las sectas. Lamentablemente, el lavado de cerebro que practican para aprovecharse de sus miembros consigue que en muchísimos casos, como el de Claudia Gaido, mueran pensando que han dado su vida por una causa noble, sin ver las señales y contradicciones ni siquiera en su propio lecho de muerte.

Por eso es que luchamos contra Scientology, por gente como Claudia Gaido, para evitar que tantos otros terminen como ella, para abrirles los ojos y rescatarlos a tiempo. Muchas veces lo hemos logrado, mi esposa Eevey es un claro ejemplo de esto. Pero lamentablemente, muchas otras veces tenemos que enterarnos de este tipo de noticias, que duelen mucho, pero reafirman nuestra convicción y voluntad para seguir dándolo todo para evitar que otros tengan el mismo final.

Aunque muchos de los miembros de Scientology puedan pensar que somos la peor basura del universo por oponernos a su grupo, nos solidarizamos con ellos, les expresamos nuestras condolencias, y esperamos que se den cuenta a tiempo que nosotros no somos sus enemigos, sino el grupo al cual dan sus vidas. Nuestras condolencias para sus familias y amigos, dentro y fuera de Scientology. Estamos con ustedes, y como ustedes, sentimos dolor por su pérdida.

Para finalizar, los dejamos con lo que leen cada vez que alguien muere en Scientology, escrito -como no podía ser de otra manera- por su fundador L. Ron Hubbard, que también postearon en Facebook para despedirla:
Scientology Argentina
16 de enero

Nuestra pérdida
será ganancia en otros tiempos.
Nuestras esperanzas dirigidas al futuro,
deben, pues, depender de incidentes como estos,
pues los cuerpos envejecen y se ajan.
Y en
la fina harina del molino del tiempo
se consume en servicio
como el tuyo,
y va, nuestro tiempo como un instante
hacia el ayer, donde empezará
la conquista de la Eternidad.

¿Qué sabíamos nosotros
cuando llorábamos en los días ya pasados?
Cuán a su merced nuestra ignorancia nos tenía
que en nuestra presunción sentiamos
que todos éramos mortales en este mundo
y las vidas ya vividas se perdían
derrochadas en nuestros egoístas egos.

Cuán estrecha es tal visión
creer que
deberíamos eternamente ser
el objeto de toda fatiga
y miseria
de la cuna a la sepultura,
y que, como en un drama,
el telón caiga
dejando vacío el escenario.
Cuán necio fue nuestro sentir
que éramos objeto entero de esta lucha
y que tan sólo vivíamos una vez
y que el vivir entonces reconcilió
todo lapso de una vida tan efímera.

Ah no, un drama más grande,
aquí se planteó y se llevó a escena,
y nosotros con estrecho entendimiento
pasamos por alto este designio.

Dijimos que todo es
carne mortal
el espíritu sólo es algo
que enviar, por unos céntimos
a algún extraño paraíso
para allí dilapidar su maestría
o, de no pagar el precio,
a algún otro lugar profundo
a padecer, y a derrochar
nuestra existencia.
¿A qué abismos tenebrosos
fueron arrojadas nuestras tenues mentes
para creer que la carne
es capaz de amar, de confiar o de vivir
para creer que las uñas y máscaras
son todo lo que necesitamos para soñar?
¿A qué profundo lugar
fue arrojado nuestro amor
que la masa inerte pudiera compensar?

Las ansiedades que dominaron nuestros años
se nutrieron aquí.
Y nosotros
cegados e insensibles
por otra ambición avariciosa
redujimos nuestras vidas
sólo a una.
¡Qué despilfarro!
¿Creer que todo nuestro amor,
nuestro trabajo,
nuestros dones,
nuestro conocimiento
y nuestros suspiros
estaban destinados
a consumirse
todos en un único
aliento y un destello fugaz
y bajo una sólo identidad?

Hoy, más sabios ahora
con las cadenas aflojadas
y la tiranía del culto
fatigada y hastiada con los años,
miramos
y encontramos que vivimos
no sólo una vez
sino una y otra
desde el nacimiento del cuerpo
hasta la tumba,
para nacer otra vez
y volver a la tumba de nuevo
para deshacernos de las posesiones
que a menudo terminan
con la vida.

Centenario a centenario
de una a otra era y más
marchamos por
la senda que conduce
para siempre por el inconmensurable
paso del tiempo.
Gateamos, caminamos y volamos,
nosotros conseguimos
desde aquí y eternamente
el legado de todas nuestras vidas,
y de nuevo lo perdemos todo otra vez.

Pero esta no es una mirada
triste y desolada,
no es algo lamentable
esta vida.
Una aventura pura
donde sin cuchillo o
o sin provisiones
en vuelo al infinito
y abarcamos lo eterno en un suspiro.
Una aventura es esta donde
vamos rompiendo las ataduras
del cuerpo
y seguimos caminando
nuestra senda.

Nuestro sufrir es
egocéntrico aquí
pues hemos perdido,
en verdad,
la sonrisa,
el tacto,
la destreza y la alegría
recibidas
de Claudia
quien nos dio
de su pasado
capacidad para vivir
y navegar contra
las mareas y tormentas del destino.
Es cierto que hemos perdido
su hombro
empujando tras la rueda
como están perdidos su consejo
y su fuerza
pero perdidos
sólo por un tiempo.

Ella se va
no con el triste redoble del tambor
sino con un susurro como el
suspiro de un hada
a allanar el camino
para nuestra llegada.
Allí estará ella en un halagüeño
tiempo futuro
y en un lugar futuro
su sonrisa,
su tacto,
su destreza
destinados ahí a crear
un camino para la vida.

Cierto, es muy cierto, que tal vez no
la conozcamos entonces ni
conozcamos su obra.
Pero aún así
si no enviáramos por delante
nuestros centinelas en el tiempo
no tendríamos entonces
una raza.

Y así, escindida ya
de esta
línea genética
y dirigida a algún nuevo
rincón o a un nuevo mundo,
te enviamos, claudia,
y allí habrá,
ya lo sabemos,
una sonrisa,
un tacto,
una felicidad para nosotros,
y para ti
que no pudiste hallar
en la Tierra.
Y así llegan y pasan,
el día, el año,
los milenios.
Y así avanzamos
con estandartes replegados
y en silencio,
caminamos por nuestra senda
pero ahora ya sabemos
y ahora si hallaremos
el camino.

En las tinieblas
ha penetrado la luz
en la mañana
entra la noche
al paraíso
no hace falta que vayas.
Y hacia la vida
nuestros espíritus se elevan
conquistando para siempre
el arsenal del saber.
Nosotros no temblamos
ante la muerte
sabemos que vivir
no es tan sólo respirar.

¡Levántate!

Ve, claudia,
y toma
la vida
que se ofrece ahora
y vive
con la feliz expectativa
de que nosotros
haremos nuestra parte.
Ve, claudia,
tú puedes controlar
lo que habrás de gobernar.

Nuestra pérdida
es ganancia
en sabiduría y en destreza
hacia el futuro y otras sonrisas
y así enviamos a la
cadena del imperecedero tiempo
nuestro legado,
nuestra esperanza,
a nuestra amiga.

Adiós, claudia.

Gracias, te dicen los tuyos por haber vivido.
Este mundo es mejor porque tú has vivido.
Hombres, mujeres y niños están vivos hoy
porque tú viviste.
Gracias te damos por haber venido a nosotros.
No impugnamos tu
derecho a marcharte.
Tus deudas están pagadas.
Este capítulo de la travesía de tu vida ha concluido.
Ve ahora, querida claudia y vive una vez más
en un tiempo y un lugar más felices.
Gracias, claudia.

Ahora todos los que estamos aquí alzad
la mirada y decidle a
ella

Adiós.

Adiós.

Adiós, amiga
Adiós.

Te vamos a extrañar, tú bien lo sabes.

Deja que ahora el cuerpo
se retire
para ser consumido hasta cenizas
y hasta el polvo,
en fuego limpio y terrenal
para ya nunca ser más, nunca ser más.

Y eso está ahora ya cumplido.

Vamos amigos,
Ella está bien
y se ha marchado.
Nos esperan ahora las tareas
por hacer. Y ella tiene la suya.
Allá a donde vaya.

Al hombre!

L. Ronald Hubbard