miércoles, 9 de mayo de 2012

Evento por la Muerte de L. Ron Hubbard en Scientology

Por Petete “Argie” Anon para Anonymous Argentina

Esta entrada se encuentra en proceso. En los próximos días y semanas será corregida y aumentada, con más información y videos, por lo que recomendamos volver regularmente.

Los últimos años de L. Ron Hubbard

El fundador de Scientology, L Ron Hubbard, a menudo decía que el más básico impulso del hombre era sobrevivir. Cuando le tocó a él, hizo cualquier cosa que fuera necesaria para eso: falsas identidades, historias ocultas, engaño.

No hay mejor ilustración de esto que la forma en que secretamente controló la Iglesia de Scientology mientras se escondía de un mundo que le resultaba cada vez más hostil.


L. Ron Hubbard fue visto públicamente por última vez en Febrero de 1980, en la comunidad del desierto de Hemet, a unas pocas millas del complejo habitacional de alta seguridad que alberga el estudio cinematográfico y de grabación de Scientology. Su repentina desaparición impulsó especulaciones de todo tipo.

La Iglesia de Scientology dijo que Hubbard se recluyó para continuar con sus “investigaciones” y para resucitar su carrera de escritor de Ciencia Ficción. Pero antiguos ayudantes dijeron que se ocultó para evitar citaciones y agentes impositivos del gobierno investigando acusaciones de que estaba esquilmando fondos de la “Iglesia”,

Publicaciones de todo el mundo hablaban sobre la desaparición de Hubbard. “Misterio del Gobernante Desaparecido” era el titular en la revista Time.

Hubbard llevó con él sólo a dos personas, el matrimonio formado por Pat y Anne Broeker. Pat Broeker, mensajero personal de Hubbard en aquél momento, se había escondido con Hubbard una vez anteriormente y sabía como garantizar su seguridad. Broeker disfrutaba de las operaciones de capa y espada. Su apodo entre los otros mensajeros de Hubbard era “007”.


Anne había sido una de las ayudantes top de Hubbard por años. Se mantenía tranquila bajo presión, y era capaz de desactivar el temperamento volátil de Hubbard. Hubbard y los Broeker pasaron varios de los primeros años moviéndose juntos. Por meses viajaron por el Noroeste del Pacífico en un motor home. Vivieron en departamentos en Newport Beach y los suburbios de Los Angeles.

En el verano de 1983 decidieron establecerse en un polvoriento pueblo ranchero llamado Creston, población 270, donde el cálido clima árido sería bueno para la bursitis de Hubbard. Alrededor de 48 KM al interior de San Luis Obispo, era el lugar perfecto para que un hombre de notoriedad viviera en la oscuridad, donde la gente no se mete en los asuntos de los otros.



Hubbard y los Broekers inventaron una elaborada serie de nombres y antecedentes falsos para ocultar sus identidades de los ciudadanos. Pat y Anne Broeker cambiaron sus nombres a Mike y Lisa Mitchell, Hubbard se transformó en el padre de Lisa, Jack, quien impresionó a los lugareños como un viejo parlanchín, carismático pero a veces brusco.

Compraron un rancho de 160 acres conocido como the Whispering Winds por 700.000 dólares usando 30 cheques de caja elaborados en varios bancos de California. Pat Broeker dijo a los vendedores, Ed y Sherry Shaban, que recientemente había heredado millones de dólares y estaba buscando dejar su hogar en el norte del estado de New York para criar ganado en California.



En aquél momento los Shabans sospecharon. Como Ed Shaban recordó “Tuvieron problemas para decidir a nombre de quién poner la propiedad”.

En menos de tres años Hubbard virtió un estimado de tres millones de dólares en la economía local mientras rediseñaba el rancho según sus exactas y elaboradas especificaciones. Lanzó un proyecto tras otro, algunos aparentemente sin sentido, según los residentes locales. Ordenó la construcción de una pista de carreras de caballos de un cuarto de milla con una torre de observación, las cuales nunca fueron usadas.



La casa de 10 habitaciones del rancho fue destrozada y remodelada tantas veces que fue inhabitable durante la estadía de Hubbard ahí. Él vivió y trabajó en los establos y en el lujoso motor home Bluebird de 12 metros estacionado cerca de los establos.

Todo esto fue hecho sin permisos de trabajo, lo que significaba que Hubbard y sus ayudantes no tenían que preocuparse sobre inspectores del condado entrometidos.


Como los ayudantes de Hubbard en años anteriores, los ayudantes contratados vieron lados extremos del hombre que era conducido alrededor de la propiedad en una pickup Subaru negra por Anne Broeker.

El contratista de alambrado Jim Froelicher de Paso Robles recuerda haberle pedido consejo para comprar una cámara. Varios dias después Hubbard le regaló una cámara de 35mm.

Ed Lindquist, largamente residente de Creston, por otro lado, dijo que los pintores caían a la taverna local al almuerzo para hablar de como “el viejo” actuaba excéntricamente. Decían que los había tenido pintando las paredes una y otra vez porque “no eran suficientemente blancas”



Oficiales de Scientology insisten en que Hubbard estaba en buen estado físico y mental durante sus años en aislamiento. La mayor parte de los días, dicen, los pasaba leyendo, escribiendo y disfrutando de la belleza del rancho y su ganado, que incluía llamas y búfalos. Pero Hubbard hacía mucho más, según antiguos ayudantes. Incluso escondiéndose, dicen, vigiló de cerca y mantuvo un fuerte control de la iglesia que creó, como había hecho por décadas.

En 1966 Hubbard afirmó haber renunciado al control directivo de la iglesia. Pero ex-Scientologists y varias sentencias judiciales han sostenido que esto fue una maniobra para escudar a Hubbard de potenciales acciones legales y rendición de cuentas por las actividades del grupo.

Sobre los años, los esfuerzos por ocultar los lazos de Hubbard con la iglesia fueron extensivos y extremos. En 1980, por ejemplo, se llevó a cabo una operación masiva de destrucción de documentos en el complejo del desierto fuera de Palm Springs luego que oficiales de Scientology recibieran una información errónea sobre un inminente allanamiento del FBI, según antiguos ayudantes.

“Cualquier cosa que indicara que L. Ron Hubbard controló la iglesia o estuvo comprometido con la administración debió ser destruido” recordó la antigua oficial de relaciones públicas Laurel Sullivan. Por más de dos días, dijo Sullivan, al menos 200 Scientologists amontonaron miles de documentos dentro de una enorme trituradora apodada “Jaws” (mandíbulas). Los documentos demasiado valiosos para ser destruidos, agregó ella, fueron enterrados en el suelo o bajo los pisos.

En su exilio autoimpuesto Hubbard continuó reinando sobre Scientology con secretismo casi paranoide. Hubbard transmitió sus órdenes por escrito o grabadas en cassettes a Pat Broeker, quien entonces las pasaba a un cienciólogo de rango llamado David Miscavige, el hombre responsable de ver que los ejecutivos de la iglesia cumplieran.

Los comunicados de Hubbard viajaron por una ruta tortuosa en la oscuridad de la noche, cambiando de manos de Broeker a Miscavige en sitios designados a través del sur de California. Para enmascarar la identidad del autor, las misivas fueron firmadas con códigos que cargaron el peso de la firma de Hubbard.

A veces Broeker mismo aparecía, desconociéndose de dónde venía, para entregar personalmente instrucciones de Hubbard a ejecutivos de la iglesia. Desde su secreto asiento de poder en las colinas de oak-studded sobre San Luis Obispo, Hubbard también se aseguró que no sería cortado de las riquezas de su imperio de Scientology, dirían luego desertores de alto nivel de la iglesia a investigadores del gobierno.

Ellos alegaron que Hubbard esquilmó millones de dólares de la iglesia mientras estaba en la clandestinidad, continuando con una tradición que el Servicio de Impuestos Internos (IRS) dijo que comenzó prácticamente con la creación de Scientology 30 años atrás de aquél momento. Hubbard y sus ayudantes siempre negaron las acusaciones, y acusaron al IRS de emprender una campaña contra la iglesia y su fundador.

Mientras Hubbard estaba en la clandestinidad, el IRS lanzó una investigación criminal de sus finanzas. Pero la investigación pronto carecería de un blanco, y finalmente fue abandonada.

El hijo mayor de L. Ron Hubbard con su primera esposa Margaret Louise Grubb, Lafayette Ronald Hubbard Jr (apodado “Nibbs” Hubbard), luego de rechazar a su padre y la secta de su creación (con la cual colaboró en los primeros días) cambió su nombre a Ron Edward DeWolf y el 6 de Noviembre de 1982 en una corte de Riverside, California, demandó por el control de los bienes de su padre alegando que LRH se encontraba muerto o mentalmente incompetente y que los ejecutivos de Scientology estaban saqueando sus riquezas bajo la administración liderada por David Miscavige.



En 1984 la demanda fue sobreseída luego que Hubbard, a través de un abogado, enviara una declaración jurada con sus huellas digitales diciendo que estaba bien y quería ser dejado en paz.



Sin duda Hubbard disfrutaba las especulaciones sobre su paradero y actividades, ya que siempre se consideró un astuto estratega y maestro en el juego de inteligencia, calculando infinitamente como superar a sus enemigos. Pero este tipo de episodios lo incomodaban al demostrarle que, si bien seguía manejando los hilos de Scientology desde las sombras, empezaba a perder poder casi tan vertiginosamente como su salud empeoraba.

L. Ron Hubbard no estaba feliz con David Miscavige desoyendo sus exigencias sobre los abogados que debían representarlo en el caso contra su hijo Nibbs y tomándose la libertad de elegir según su criterio. Menos aún cuando esos abogados le aconsejaban retirarse del manejo de los asuntos de Scientology. Y parte de las razones de eso eran que Miscavige sentía (y había dicho a los abogados) que LRH perdía contacto con la realidad.

Jesse Prince, ex-Inspector General de Ética de Scientology, segundo puesto más alto del RTC (Religious Technology Center) lo recordó de esta forma en un post del sitio alt.religion.scientology del 5 de Septiembre de 1998: “En verdad Miscavige no era el único que sabía que Hubbard era un anciano sin reales “nuevas ideas” o “revelaciones brillantes” desde hacía un buen tiempo. Todo lo que podía hacer era decir las mismas cosas una y otra vez: “¡Hay más BTs! ¡Más de los que la gente se da cuenta!”. Hubbard estaba senil, su cerebro estaba bastante frito por un gran número de drogas que usaba para sus “investigaciones”, y eso asustó terriblemente a sus mensajeros top y otros cercanos a él.”.

“Por varios años el máximo ayudante de LRH, Pat Broeker, y su esposa, Annie Broeker, cuidaron diariamente de LRH. Pat era el conducto financiero entre LRH y las vastas reservas de dinero líquido montado en múltiples corporaciones de Scientology que LRH siempre había tenido a su disposición. David Miscavige era llamado por Pat para traer cientos de miles o millones de dólares en efectivo en maletines para cubrir “gastos básicos” de LRH y su pequeño equipo de cuatro empleados. A menudo el lugar de reunión preacordado era cerca de Las Vegas. En muchas ocasiones Pat y Dave irían a un casino y apostarían miles de dólares del dinero de LRH simplemente pasando buenos ratos juntos.”.

“Pero mientras LRH sentía que su dominio en el imperio de Scientology se debilitaba, empezó a sospechar extremadamente de Dave y me ordenó darle un “Chequeo de Seguridad” para ver si Dave estaba tratando de impedir que LRH se saliera con la suya con la iglesia como acostumbraba. Básicamente lo que le molestaba a LRH era no poder simplemente pasar de una corporación falsa a otra, causando estragos a su paso, como siempre había hecho. Y estaba siendo aconsejado por los abogados contratados por Dave que para proteger su dinero debía desaparecer por un tiempo. Todas estas circunstancias ayudaron a que LRH no estuviera seguro sobre si podía confiar en DM. Temía que DM estuviera tratando de tomar el poder. Seguro, él había prácticamente criado a DM de cachorro, pero aún así, ¿quién puede ser confiable en este negocio?”

“Entonces me ordenó hacerle un chequeo de seguridad (interrogatorio) a DM para determinar sus reales motivos para pasarle el consejo legal de retirarse de su propia iglesia. Cuando entré a la oficina de Dave él lloraba como un chico que se había cagado en los pantalones y ahora apestaba hasta el alto cielo. Dave me juró arriba y abajo que él sólo siguió las órdenes de LRH para lograr un “todo aclarado” -- significando tener a LRH despegado de todos los litigios pendientes -- así LRH podría viajar libremente otra vez, sin temores de citaciones o algo peor.”.

“LRH había estado ocultándose, no sólo del público sino también del 95 % de todo su staff, por los últimos 15 a 20 años de todos modos. Dave estaba extremadamente indignado al hacerle tales preguntas incriminatorias, pero por esas preguntas que le hacía, él estaba bastante seguro que LRH pronto lo asignaría al RPF (Rehabilitation Project Force, la prisión política de Scientology).”.

“En el chequeo de seguridad Dave se aseguró de contarme sobre los viajes a los casinos, el excesivo alcoholismo y la mujer que él y Pat disfrutaron juntos. Dave libremente confesó sus pecados así como también los de Pat Broeker. Dijo que si él se iba para abajo, iba a asegurarse que Pat Broeker cayera también. Era muy crítico de Pat, diciendo que tenía un largo historial de abuso del alcohol y de gastar imprudentemente el dinero de LRH. Por supuesto, la persona que recibió el reporte del chequeo de seguridad de Dave fue Pat Broeker. Así que no me sorprendió ni un poco cuando Dave y Pat repentinamente se volvieron los mejores amigos otra vez. Dudo seriamente que nada más que reportes llenos de brillantes alabanzas para Dave llegaran a LRH. En retrospectiva me doy cuenta que ambos, Pat Broeker y David Miscavige tenían interés en mantener el status quo con LRH, ya que ambos tenían sueños de algún día ser el nuevo dictador de Scientology una vez que el actual Ding Dong rey hubiera muerto.”.

“LRH continuó gastando libremente sus millones en la propiedad e “investigación” (todo esto realmente significaba que estaba comprando más y más drogas para él) y comprando animales exóticos como búfalos, llamas, cisnes y pavos reales en el rancho en Creston.”.

“LRH pareció resignado a seguir el consejo legal de los abogados de Dave y se mantuvo lejos de Scientology. Sin embargo, hizo saber que aún estaba muy engranado con todo el asunto y se negó a hacer contacto como había hecho en el pasado.”.

“Alrededor de un año y medio después se enfermó mucho.”.


CONTINUARÁ...

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